El documental animado, Flee, ha conseguido tres nominaciones al Oscar 2022: mejor película internacional en representación de Dinamarca, mejor cinta animada y mejor documental.
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Flee es una película de animación que cuenta la historia de un refugiado de Afganistán en Dinamarca. La película se basa en un episodio real, aunque se guarda la identidad del protagonista, bautizado como Amin.
El documental describe el tormentoso camino seguido por Amin para encontrar algo de paz en su adultez. La crisis de su país en Afganistán lo obligó junto a su familia a dejar ese país y refugiarse en Rusia en época en que mandaba el comunismo.
Empujado por las difíciles circunstancias en que vagaba esa nación, Amin junto a su madre y hermanos decidieron probar suerte en otras naciones europeas. Llegaron a Rusia, pero no encontraron la paz soñada. Intentaron otro destino y debido a su estatus de ilegal pactaron con traficantes para llegar a esos países. Estos viajes colocaban su vida cerca al abismo y con un pie en una tumba. Aunque el viaje de Amin y su familia es duro, se siente una recompensa a medias al final, un epílogo agridulce que lo otorga una nueva oportunidad.
Flee aborda uno de los muchos testimonios de migrantes que abandonan sus países de origen en busca de un mejor destino. La historia resulta triste, conmovedora y valiente.
Pero Amin no solo huye de su país, sino también de su identidad sexual. Es homosexual, una orientación inaceptable en una familia musulmana. Sin embargo, dada la situación de su familia no es momento de develar este secreto, sino sumar fuerzas para encontrar el paraíso prometido. En esta triste aventura Amin deberá esconderse y priorizar objetivos en este caos.
ANIMACIÓN
La animación facilita no solo ocultar la identidad del personaje central, sino también la narración. Una cinta animada se toma muchas licencias para describir emociones y exponer temores, para hacer fluir mejor la historia. Esta propuesta se presenta como un valor agregado al testimonio de este refugiado.
Flee es un documental que merece verse en momentos en que no decae ese sentimiento aintimigrante avivado muchas veces por políticos ambiciosos y necesitados de popularidad para mantenerse vigente ante sus despistados electores. Este documental nos hará recordar que jamás quisiéramos estar en los zapatos de un refugiado.