Buena suerte Leo Grande pasó desapercibida para la audiencia. Esta película independiente, grabada principalmente al interior de una habitación, entrega una historia interesante. Además de una de las mejores interpretaciones de Emma Thompson.
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La película narra la historia de la maestra Nancy Stokes. La profesora contrata los servicios sexuales de un joven llamado Leo Grande. Ambos se encuentran en una habitación de un hotel. A partir de esta cita inicia una relación que habla sobre las relaciones de pareja y el trabajo sexual.
Nancy es una mujer que busca un orgasmo, un placer desconocido para ella pese a su larga relación con su esposo ya difunto. Su objetivo es explorar su cuerpo y conocer esta satisfacción no encontrada en su matrimonio. De alguna manera se deja llevar por la cordialidad y carisma del joven gigolo con quien entabla largas conversaciones francas e interesantes sobre su matrimonio.
Pero esa confianza también le permite conocer la verdadera historia de Leo Grande escondida detrás de este nombre falso.
Esta película no sale de la habitación de hotel. Buena suerte Leo Grande es una cinta de interpretación y diálogos. Es una propuesta teatral donde importan más las actuaciones de los personajes. En ese sentido sobresale Emma Thompson, una actriz cuya carrera es reconocida por el medio, pero que en esta oportunidad, añade riesgo y osadía en su performance.
En la escena final Thompson protagoniza un desnudo cuyo objetivo es que el personaje sea honesto con su cuerpo y lo acepte frente a un espejo. La toma resulta franca y honesta que ayuda a entender mejor la naturaleza del personaje. Este momento de la cinta me hizo recordar a Gloria de Sebastián Leilo, cinta del 2013, en que la protagonista también decide desnudarse para demostrar que no tenía miedo de aceptar su cuerpo.
Interesante película que desafortunadamente no tiene mapeada el público y que ojalá entregue algunos premios, principalmente, al trabajo de Emma Thompson.
